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Quema un contenedor por las cenizas de un fuego a tierra

Bomberos de Llívia y efectivos de la brigada municipal han intervenido en la extinción del contenedor.

El Ayuntamiento de Llívia recuerda que las cenizas de las chimeneas deben tirarse en los contenedores de restos o en los contenedores de la orgánica (en este caso si son de restos exclusivamente vegetales), pero siempre, en todos los casos, que no haya brasas encendidas. Deben haberse mojado, bien apagadas, y nunca tirarlas inmediatamente después de haber utilizado el fuego a tierra.

Aunque esta práctica parece que nunca debería pasar —es de una lógica evidente—, cada año, cada temporada de invierno, alguien o algunos siguen haciendo caso omiso del sentido común y de las recomendaciones. Y cada año, y cada temporada de invierno, ya sean efectivos de Protección Civil, brigada municipal, bomberos de la Generalitat o agentes locales deben actuar para apagar el fuego de ese contenedor que arde y que puede o podría acabar con alguna desgracia mayor.

Esta mañana del lunes, 3 de enero, en Llívia, se ha tenido que intervenir de urgencia para apagar las llamas de un contenedor en el que se había tirado cenizas. Pudo ser peor si las llamas se hubieran subido cuestas arriba y hubieran abrazado el bosque de la montaña de la colina de Cereja. Por suerte, esta circunstancia no ha ocurrido gracias a la efectividad de los bomberos y de los miembros de la brigada municipal.

Recomendaciones con las cenizas
Para retirar las cenizas de una chimenea se recomienda dejarlas reposar uno o más días en cubos metálicos, y echar agua, para eliminar cualquier posibilidad de brasa. Las cenizas, antes de lanzarlas, deben estar totalmente apagadas.

La prevención es clave si queremos evitar riesgos innecesarios. Y en este sentido, necesitamos la participación de todos y todas.

Basta de suciedad, por favor!
El Ayuntamiento de Llívia quiere aprovechar este escrito para pedir, vecinos y vecinas de Llívia, que seamos más cívicos y más responsables. No es más limpio el que más limpia; es más limpio el que menos ensucia. Hay que decir basta a determinadas acciones y actitudes de algunas personas que les da igual el uso de los contenedores y dejan los desechos, los trastos y los restos en cualquier lugar de la vía pública. Podemos intuir que son personas, seguro que pocas, que no quieren a Llívia y su conducta personal está marcada por la insolidaridad. Son gente que probablemente reclama a la administración municipal o comarcal o estatal, más recursos para la limpieza de calles. Son individuos que sólo priman sus derechos, pero no quieren oír hablar de los deberes que deben afrontar como miembro de una comunidad, de un pueblo y de una sociedad. El egoísmo llevado a la máxima expresión.

Dicho esto, con el escrito no se pretende señalar a nadie, pero como recomendación de vuestra administración municipal debemos dirigirnos a nuestros vecinos y vecinas. ¿Por qué esa aclaración? Porque somos conscientes de que la gestión actual de los residuos es un quebradero de cabeza y los territorios son permeables y los desechos transportables; no hay forma de evitarlo.

En breve, tendremos buenas noticias, con la puesta en funcionamiento del sistema de recogida del Porta a Porta que se encuentra en fase de concreción por parte del Consell Comarcal de la Cerdanya. Ya tenemos muchas ganas de ponerlo en funcionamiento para mejorar la gestión de los residuos y la imagen de la vía pública de Llívia. En unas semanas se convocarán charlas informativas del nuevo sistema de recogida de desechos.

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