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Llívia mantendrá cerrados, provisionalmente, los baños de Sant Guillem por la pérdida diaria de miles de litros de agua

Para rellenar las balsas cada día, el agua antes necesita ser filtrada y clorada a diario, con el coste que supone el uso de los productos químicos más el gasto energético

Los baños de Sant Guillem no se abrirán este verano, con toda seguridad. El Ayuntamiento de Llívia cree que no debe hacer frente a la carga económica diaria que supone tenerlas abiertas. Las balsas de agua necesitan, a diario, miles de litros de agua nueva. Esto ocurre porque se ha constatado que la instalación pierde esta gran cantidad de agua.

Por la mañana, cuando es necesario rellenar las balsas, el agua del pozo debe ser filtrada y clorada, para dejarla óptima por el baño. Así, se necesitan decenas de litros de cloro diario para tratar los metros cúbicos de agua nueva que entran en las balsas, aparte del producto químico que se utiliza para rebajar su pH que permita el baño. Éste es un coste diario que, diariamente, valga la redundancia, se pierde por el escape de agua de las balsas.

Se calcula que, al por mayor, la pérdida diaria de agua es de un tercio la capacidad total de las cuatro balsas. Al derroche económico que supondría tener los baños de Sant Guillem abiertos se añade el desperdicio de un recurso escaso, viniendo de una época de restricciones. En el momento actual, que se mantiene un control responsable sobre la evolución y el estado de las reservas de agua y donde todavía existen municipios catalanes que sufren restricciones de agua, el Ayuntamiento ha decidido que no debe abrir los baños.

El Ayuntamiento de Llívia ha iniciado un estudio para determinar las causas de la pérdida de este agua, decidirá los pasos a tomar en un futuro a partir del estado de la instalación y valorará los daños y pérdidas que puede haber generado y genera a la población esta situación.

 

(Fotografia: Ajuntament de Llívia / J.P.V.)

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